Por Bina Lara, madre de familia
Los martes 12 y 19 de Octubre, tuve la oportunidad de ofrecer a maestras, papás y mamás de la escuela, dos pláticas relacionadas con el cuidado del ambiente.
La primera sesión hablamos sobre la diferencia entre la relación de extracción, explotación, contaminación y agotamiento de los recursos naturales por parte del ser humano hacia la naturaleza, y una relación en la que tomamos los recursos y devolvemos desechos fácilmente reconocibles para su reutilización en los ecosistemas.
En el primer caso, los recursos se agotan y la vida corre peligro; en el segundo los recursos se transforman nutriendo la tierra, y la vida continúa.
Hablamos del significado de términos como reciclar, reutilizar y reducir, llegando a la conclusión de que en el actual estado de las cosas es muy importante un cambio de hábitos, tanto al comprar como al desechar. Al respecto encontramos las opciones:
evitar los empaques individuales y preferir los familiares o a granel, así como el uso de las bolsas de mandado, los trastes de plástico lavables tipo Tupper, para evitar el uso de empaques que vayan a dar a la basura.
También tratamos el tema de la separación de desechos orgánicos e inorgánicos entre limpios y los que no lo son:
[haz click en la tabla sí necesitas ampliarla para su lectura]
El siguiente martes tratamos el tema de la lombricomposta. Les presenté la lombriz roja de california y hablamos de sus cualidades, así como de los cuidados que requiere. Construimos juntos un espacio en el que se depositaron los desechos orgánicos picados que los papás trajeron de sus casas, los cubrimos con hojas y cartón y a un lado colocamos las lombrices, para que se acercaran cuando la materia orgánica estuviera lista. Algunos papás se sintieron motivados a realizar una lombricomposta en sus casas, así que fueron a solicitar su pie de cría al vivero municipal de Xalapa.
En los siguientes días, varios papás y niños nos hemos seguido reuniendo a la salida de clases para cuidar que las hormigas no las invadan, haciendo junto con nuestros niños un pequeño cajón de bambú cubierto de teja de cartón para protegerlas.
Todos los que gusten acercarse están invitados.
